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Una de las entradas al TEMPLO DEL DIENTE de Kandy
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Tras un estupendo desayuno en el idílico "Villa Shenandoah", nos recoge "AMILA" (nuestro guía) para visitar uno de los Templos emblemáticos e importantes (si no el que más) de Sri Lanka. "EL TEMPLO DEL DIENTE". Al norte del lago de la ciudad de Kandy se encuentra este famoso templo que alberga la "Reliquia budista" más importante, un diente del mismísimo Buda. El budismo es la religión más practicada en Sri Lanka y este es uno de los lugares más sagrados de la isla, que sirve de peregrinaje a millones de budistas, estando incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El diente se guarda en el "Sri Dalada Maligawa". Según la leyenda, el diente fue quitado de Buda mientras yacía en su pira funeraria en la India en el 483 A.C. Fue llevado a Sri Lanka en el 313 D. C, escondido dentro del moño en pelo de la princesa Hemamali, que huyó de los ejércitos hindúes que sitiaban el reino de su padre en la India. 
Cuando la capital fue trasladada a Kandy, el diente fue llevado a la nueva ciudad y colocado en Templos construidos para honrarlo. Se creía que quien tenía la custodia del diente tenía derecho a
gobernar el país. El Templo fue construido originalmente bajo los reyes de Kandy en la primera mitad del siglo XVIII entre 1687 y 1707, formaba parte del palacio real. Más tarde se dañó severamente durante las guerras coloniales del siglo XVIII contra los portugueses y los holandeses. Después de las guerras, las estructuras de madera originales fueron restauradas por unas en piedra. Antes de entrar el recinto, tenemos que pasar los pertinentes controles de seguridad. Además, también tendremos que vestirnos de forma adecuada para entrar al templo, como en todos los recintos sagrados que hemos ido visitando a lo largo de nuestro recorrido por Sri Lanka, te "tienes que cubrir las rodillas y la espalda". Recomiendo llevar unos calcetines ya que tendremos que descalzarnos.
Nada más entrar nos encontramos ya con nuestra primera gran sorpresa, por la explanada que hay frente al
"Palacio" vemos cómo va caminando tranquilamente un
elefante , eso sí acompañando en todo momento por sus cuidadores, entre la cantidad de personas que van camino del
Templo.
Una gran explanada nos conduce al Templo principal, el "VAHAHITINA MALIGAWA", donde se guarda el "Diente de Buda". Los visitantes llegan desde todas partes
de Sri Lanka y del mundo para hacer ofrendas en los días de
culto. Miles de peregrinos están esperando su turno para ver esta Reliquia, el interés por ver la Reliquia del "Diente de Buda" ha generado "peregrinaciones masivas". De hecho, la
mayoría de los habitantes de la isla intentan visitar el Templo al
menos una vez en la vida para rendir homenaje a esta importante "Reliquia budista". Dentro del recinto del santuario los monjes con el acompañamiento de tambores y flautas tradicionales, cantan las oraciones
de "MALWATTE" y "AEGIRINE", tres veces al día, durante el amanecer, el mediodía y la noche, para indicar a los fieles que es el tiempo para realizar las "Ofrendas".
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Puerta al Santuario del Diente de Buda
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Vistas desde las ventanas de la Biblioteca
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Torre del Palacio Real donde se encuentra la Biblioteca
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Antes de entrar en lo que es el
santuario principal, nos dirigimos a la parte superior, donde se encuentra la
"BIBLIOTECA". Era una antigua
torre del
"PALACIO REAL", lamentablemente, aquí
no dejan ni sacar fotografías ni videos, ya que en ella hay además de
cientos y cientos de libros antiguos sobre la historia de
Sri Lanka , la vida de
Buda y el
budismo, también hay
objetos de oro y plata de mucho valor y que han sido donados por distintos países (
Japón,
Tailandia, etc...). Vemos que en el suelo hay
una trampilla oculta que era utilizada por el
"Rey" en caso de necesitar una salida de emergencia. La sala aunque pequeña es preciosa, con
monjes que vigilan que cumplas con todas la normas del sitio tan especial donde te encuentras. Desde aquí sí que nos dejan hacer fotografías desde las ventanas hacia el exterior, disfrutando de unas vistas maravillosas del
Palacio y sus alrededores, con el ir y venir de
"fieles".
Dentro del santuario principal, la Reliquia, no puede verse por seguridad, se guarda dentro una Estupa pequeña bañada en oro. Los
devotos desfilan lentamente por las salas en su camino
hacia la Estupa que contiene el "Diente de Buda", inclinándose para dejar ofrendas
y rezar en silencio debajo de los "murales budistas". El ambiente que se respira aquí es el de un
lugar profundamente espiritual, los peregrinos meditan en
silencio y depositan ofrendas de flores y también de comida, en una mesa frente al santuario. Es tal la cantidad de gente y de ofrendas que se depositan, que cada cierto tiempo pasan monjes del Templo para retirarlas, y así hacer hueco para más. Nos cuentan que dichas ofrendas no se tiran, sino que son llevadas a unas habitaciones especiales para este cometido hasta que las flores se marchitan del todo. Se pueden ver muchas familias que traen a sus bebes, porque al igual que los habitantes de Sri Lanka intentan visitar el Templo al
menos una vez en la vida, también intentan cuando hay un nacimiento traer al bebe ante esta esta importante "Reliquia budista". 
Incluso hay una parte del santuario destinada para que las madres estén y esperen con sus hijos pequeños. Es un momento único y sin duda de los más emocionantes de todo nuestro viaje por esta maravillosa isla y sus gentes. Los sentimientos están muy presentes y tienes que vivirlo en persona porque el momento es difícilmente explicable.
"VIDEOS DE NUESTRA VISITA AL SANTUARIO DEL DIENTE DE BUDA Y LAS OFRENDAS DE LOS FIELES A LA RELIQUIA DURANTE SU PEREGRINACIÓN".
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Pasillo con hermosas pinturas
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Puerta con relieves de Ninfas
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Después de esta emotiva experiencia, vamos dejando atrás poco a poco la riada de gente que hay a nuestro alrededor para ir visitando más partes de este gran complejo. Atravesamos un hermoso pasillo decorado con "pinturas murales" de hermosas flores de loto por todo el techo, y en las paredes los distintos monarcas que han ido pasando a lo largo de los años durante el culto en "EL TEMPLO DEL DIENTE". Los colores predominantes son los "dorados" y el "ocres" lo que da al conjunto una vivacidad y una belleza enorme, que no deja indiferente a nadie. Salimos por la puerta que da ese pasillo cuyo "marco de piedra" está decorado con relieves de NINFAS portan en cada una de sus manos, unas flores y recipientes para representar a la "BUENA FORTUNA".
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Pintura que representa la "Procesión de la lluvia"
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Salimos a un patio donde podemos admirar otras hermosas "pinturas murales", que representan las distintas "procesiones" que se llevan a cabo en los días de mayor culto. La del "Diente de Buda" con los elefantes portando la Reliquia dentro de la pequeña Estupa, y la "procesión de la lluvia". El relámpago es representado por "bolas de fuego", el trueno por el "ruido que hacen los látigos" y la lluvia se representa por medio de "la música que suena durante el evento". Los "porteadores" de cada región, llevan los estandartes que identifican al territorio del que vienen. Los colores predominantes siguen siendo los mismos "dorados" y "ocres" que en anteriores ocasiones, con la salvedad de que en este mural las flores de loto del techo, están incrustadas en un "azul claro" que representa el cielo.
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Músicos y portadores con estandartes encima de los elefantes
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Elefantes portando en pequeña estupa el diente de Buda
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Incensarios a lo largo del templo para los fieles
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Campana budista traída de Japón
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Sala de audiencias
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Otro de los edificios del recinto es la "Sala de Audiencias" o "Magul Maduwa". En esta sala, es donde el "Rey" se reunía para discutir los temas propios del Estado y de su Gobierno. Cada columna de la sala tiene una inscripción grabada que correspondía a un determinado ministro, que indicaba el lugar en donde se tenía que sentar en cada reunión. Cuanto más cerca del Trono se encontraban mayor era su influencia en las decisiones del Monarca. Se trata de un gran pabellón situado al aire libre con "columnas talladas", parecen que son de madera, pero están "labradas en piedra".
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Ranhidge de plata que contiene el Diente de Buda
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El elefante Rajah
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Justo al lado de este pabellón, se encuentra el "Salón del Elefante Rajah", en honor a este famoso gran animal que murió a finales de los 80. Este elefante
es célebre porque participó en los desfiles de la procesión del "Diente de Buda" durante más de
50 años. La Reliquia del "Diente de Buda" se ponía encima del elefante dentro del "Ranhidge de plata" (ver fotografía) y así era transportada esta importante "Reliquia budista" durante toda la procesión. Para honrar a "Rajah" cuando murió en el año 1988 a los 75 años de edad, fue
disecado y se creó hasta su propio museo. Ahora puedes verle detrás de una urna de cristal, rodeado de varias fotografías antiguas que nos muestran a "Rajah" junto a
los primeros ministros sosteniendo con orgullo sus colmillos, en otras aparece con sus "vestimentas de oro" cuando salía durante la celebración de la procesión anual. Por último y para terminar nuestra visita al gran complejo del "TEMPLO DEL DIENTE", visitamos el "TEMPLO NUEVO DEL BUDISMO".
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Personas rezando ante las estatuas de Buda en la sala del Templo
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Gran estatua dorada de Buda
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Dentro nos encontrarnos hasta
22 estatuas
de
Buda, en sus distintas posiciones, tanto sentadas como de pie, que han sido donadas por
Tailandia,
Japón,
China,
y
otros países al
Templo. Es un recinto espectacular, en donde también se respira
una gran "ambiente religioso" y los
fieles van depositando en una mesa frente a las
estatuas, las
ofrendas de
flores y
rezan una oración. Preside la sala un
precioso
Buda dorado rodeado de más imágenes de
Buda, muestra una asombrosa y lujosa
ornamentación, especialmente los
"techos
dorados" y las
estatuas
de
Buda. En sus paredes se pueden contemplar hermosas
"pinturas murales" que nos ofrecen una visión de las enseñanzas de
Buda, hasta su vida y obra. Vale la pena visitarlo no solo para los que son
budista, sino también
para aquellos que quieran aprender más sobre la
Cultura de Sri Lanka,
la vida de
Buda y su influencia.
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Una de las puertas de entrada/salida del templo
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Ofrendas florales para Buda
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Parece mentira que desde primera hora de la mañana llevemos dentro de este espectacular
"TEMPLO DEL DIENTE" . Hemos vivido experiencias únicas que se nos quedarán grabadas en la memoria al recordar nuestro viaje por
Sri Lanka. El tiempo va pasando y es hora de ir a comer en un
restaurante una rica comida local y tradicional. Salimos por otra puerta distinta a la que entramos por lo mañana, de las muchas que tiene este grandioso
Templo. Luego la tarde la dedicaremos a recorrer el
mercado tradicional de
Kandy, visitar el famoso
Lago de la ciudad, para terminar este intenso día con la visita al
Templo del
"BUDA GIGANTE DE LA MONTAÑA"...
* Para la elaboración y desarrollo de este artículo se han tenido en cuenta los datos obtenidos a través de la Wikipedia y de las propias experiencias vividas durante el viaje. (Fotografías e ilustraciones originarias de Pedro García Barbudo).
Tras un estupendo desayuno en el idílico "Villa Shenandoah", nos recoge "AMILA" (nuestro guía) para visitar uno de los Templos emblemáticos e importantes (si no el que más) de Sri Lanka. "EL TEMPLO DEL DIENTE". Al norte del lago de la ciudad de Kandy se encuentra este famoso templo que alberga la "Reliquia budista" más importante, un diente del mismísimo Buda. El budismo es la religión más practicada en Sri Lanka y este es uno de los lugares más sagrados de la isla, que sirve de peregrinaje a millones de budistas, estando incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El diente se guarda en el "Sri Dalada Maligawa". Según la leyenda, el diente fue quitado de Buda mientras yacía en su pira funeraria en la India en el 483 A.C. Fue llevado a Sri Lanka en el 313 D. C, escondido dentro del moño en pelo de la princesa Hemamali, que huyó de los ejércitos hindúes que sitiaban el reino de su padre en la India. 
Cuando la capital fue trasladada a Kandy, el diente fue llevado a la nueva ciudad y colocado en Templos construidos para honrarlo. Se creía que quien tenía la custodia del diente tenía derecho a
gobernar el país. El Templo fue construido originalmente bajo los reyes de Kandy en la primera mitad del siglo XVIII entre 1687 y 1707, formaba parte del palacio real. Más tarde se dañó severamente durante las guerras coloniales del siglo XVIII contra los portugueses y los holandeses. Después de las guerras, las estructuras de madera originales fueron restauradas por unas en piedra. Antes de entrar el recinto, tenemos que pasar los pertinentes controles de seguridad. Además, también tendremos que vestirnos de forma adecuada para entrar al templo, como en todos los recintos sagrados que hemos ido visitando a lo largo de nuestro recorrido por Sri Lanka, te "tienes que cubrir las rodillas y la espalda". Recomiendo llevar unos calcetines ya que tendremos que descalzarnos.
Nada más entrar nos encontramos ya con nuestra primera gran sorpresa, por la explanada que hay frente al "Palacio" vemos cómo va caminando tranquilamente un elefante , eso sí acompañando en todo momento por sus cuidadores, entre la cantidad de personas que van camino del Templo.
Una gran explanada nos conduce al Templo principal, el "VAHAHITINA MALIGAWA", donde se guarda el "Diente de Buda". Los visitantes llegan desde todas partes
de Sri Lanka y del mundo para hacer ofrendas en los días de
culto. Miles de peregrinos están esperando su turno para ver esta Reliquia, el interés por ver la Reliquia del "Diente de Buda" ha generado "peregrinaciones masivas". De hecho, la
mayoría de los habitantes de la isla intentan visitar el Templo al
menos una vez en la vida para rendir homenaje a esta importante "Reliquia budista". Dentro del recinto del santuario los monjes con el acompañamiento de tambores y flautas tradicionales, cantan las oraciones
de "MALWATTE" y "AEGIRINE", tres veces al día, durante el amanecer, el mediodía y la noche, para indicar a los fieles que es el tiempo para realizar las "Ofrendas". 
Dentro del santuario principal, la Reliquia, no puede verse por seguridad, se guarda dentro una Estupa pequeña bañada en oro. Los
devotos desfilan lentamente por las salas en su camino
hacia la Estupa que contiene el "Diente de Buda", inclinándose para dejar ofrendas
y rezar en silencio debajo de los "murales budistas". El ambiente que se respira aquí es el de un
lugar profundamente espiritual, los peregrinos meditan en
silencio y depositan ofrendas de flores y también de comida, en una mesa frente al santuario. Es tal la cantidad de gente y de ofrendas que se depositan, que cada cierto tiempo pasan monjes del Templo para retirarlas, y así hacer hueco para más. Nos cuentan que dichas ofrendas no se tiran, sino que son llevadas a unas habitaciones especiales para este cometido hasta que las flores se marchitan del todo. Se pueden ver muchas familias que traen a sus bebes, porque al igual que los habitantes de Sri Lanka intentan visitar el Templo al
menos una vez en la vida, también intentan cuando hay un nacimiento traer al bebe ante esta esta importante "Reliquia budista". 
Incluso hay una parte del santuario destinada para que las madres estén y esperen con sus hijos pequeños. Es un momento único y sin duda de los más emocionantes de todo nuestro viaje por esta maravillosa isla y sus gentes. Los sentimientos están muy presentes y tienes que vivirlo en persona porque el momento es difícilmente explicable.
Salimos a un patio donde podemos admirar otras hermosas "pinturas murales", que representan las distintas "procesiones" que se llevan a cabo en los días de mayor culto. La del "Diente de Buda" con los elefantes portando la Reliquia dentro de la pequeña Estupa, y la "procesión de la lluvia". El relámpago es representado por "bolas de fuego", el trueno por el "ruido que hacen los látigos" y la lluvia se representa por medio de "la música que suena durante el evento". Los "porteadores" de cada región, llevan los estandartes que identifican al territorio del que vienen. Los colores predominantes siguen siendo los mismos "dorados" y "ocres" que en anteriores ocasiones, con la salvedad de que en este mural las flores de loto del techo, están incrustadas en un "azul claro" que representa el cielo.
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